Esta tarde han llovido gotas de despedida. Lágrimas del final de un verano caluroso.
Las vacaciones de este año fueron variadas e inestables, pero alegres y acogedoras, a pesar de un gran bache inesperado.
Las tardes en la playa contemplando el ocaso, los días en casa sin hacer nada, salidas y escapadas con amigos, pelis y palomitas, despertares a las tantas, locuras…
Se acabaron por este año, dejan paso a otro periodo de tiempo, en las que las tardes lluviosas saben a tinta y papel, a frío y cansancio…


Aunque por otra parte, todo su ying, tiene su yang (el cielo, la luz, y la actividad)
Mañanas que me alegran esas personas esenciales para mí, la increíble sensación de descanso que se siente después de un examen, charlas y charlas sin sentido, emociones, sentimientos, tú…

Hasta el año que viene!

No creas.

No creas que mi palabra es el evangelio, pues nunca, nunca fui maestra en el amor.
Pero qué suerte que en el mundo de los ciegos, el tacto y el instinto sean pasión.
Pero que mala suerte que en el mundo de los necios, se confundan la codicia y el rencor.

Sin cansarme.

Y te busco sin querer, ¿para qué? Para buscarte. Sólo para leer tu nombre y no atreverme ni a pulsarlo. Mucho menos a escribirte aunque sea un “hola”, por si sin querer se envía…

Puede ser que tenga miedo, miedo a haberlo intentado y no haber conseguido nada, miedo a admitir que lo hice mal, a que por mucho que lo siga intentando no conseguiré nada, a aceptar que no soy demasiado buena para ti…

Ésa es otra de las cosas que no deja de rondar por mi cabeza, ¿Qué me falta? ¿Qué no te gusta de mí para que me ignores como si no existiera?

Nunca había intentado tanto, para no conseguir  nada a cambio…

Y todavía no me rendido.

El miedo.

El miedo es como la familia, que todo el mundo tiene una. Pero aunque se parezcan, los miedos son tan personales y  tan diferentes, como pueden serlo todas las familias del mundo.

Hay miedos tan simples, como desnudarse ante un extraño, miedos con los que uno aprende a ir conviviendo, hay miedos hechos de inseguridades, miedo a quedarnos atrás, miedo a no ser lo que soñamos, a no dar la talla, miedo a que nadie entienda lo que queremos ser.

Hay miedos que nos va dejando la conciencia, el miedo a ser culpables de lo que le pase a los demás, y también el miedo a lo que no queremos sentir, lo que no queremos mirar, a lo desconocido, como el miedo a la muerte, que alguien a quién queramos desaparezca.

Y hoy he escuchado a un tal “Punset” en la tele, un señor encantador que decía que la felicidad es la ausencia del miedo. Y entonces, me he dado cuenta de que, últimamente, yo ya no tengo miedo."

Librarse del miedo es como quitarse la ropa delante de alguien. A veces cuesta, pero cuando empiezas lo único que tienes que hacer es seguir, sin dudar. Y de repente te das cuenta de que el miedo ya no te pertenece, ha desaparecido. Como esa ropa que un día dejas de usar.

Espero que os haya gustado esta entrada, pero no me atribuyáis los méritos a mi, pues este texto es de "Los hombres de Paco".

♥ ♥ ♥ ♥ ♥ ♥ ♥ 

• Frases de la historia •

Amigos, os dejo una recopilación de frases  que se han dicho a lo largo de la historia, y que son mis favoritas, espero que os gusten! ☺

William Shakespeare.
"Donde mueren las palabras, nace la música."
"Procurando lo mejor, estropeamos lo que está bien."
"En nuestros locos intentos, renunciamos a lo que somos, por lo que esperamos ser."

Gustavo Adolfo Bécquer.
"La soledad, es el imperio de la conciencia."
"No digais que, agotado su tesoro, de asuntos falta enmudeció la lira: podrá no haber poetas pero siempre habrá poesía."

Aristóteles.
"El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona."

Gabriel García Márquez.
"Te quiero no por quien eres, sino por quien soy cuando estoy contigo."
"No llores porque ya terminó, sonríe porque sucedió."
"Recordar es fácil para quien tiene memoria, olvidar es facil para quien tiene corazón."

John Lenon.
"La vida es aquello que te va sucediendo mientras tú te empeñas en hacer otros planes."

Pablo Neruda.
"Es tan corto el amor, y tan largo el olvido"

♥ ♥ ♥

''La imperfeccion es belleza, la locura es inteligencia, y es mejor ser totalmente ridícula, a ser totalmente aburrida''
Marilyn Monroe.

Desenchúfala.

Cuantísimo daño nos ha hecho este medio de comunicación.
Este que se creó para darnos información, y culturizarnos.
Que comenzó en  blanco y negro,
Un gran inventor, hizo un gran trabajo, pero no se imaginaba a lo que podía llegar.
Sí, mis queridos amigos, hablo de la televisión, ese aparato que cada vez tiene menos uso.
El 90% de los programas actuales, son telebasura. No sirven para nada, suelen dedicarse a criticar, cotillear, insultar... etc
Solo sirve para dar trabajo a gente que no hacían absolutamente nada, y quieren vivir por la cara.
Así que España, moderémosnos un poco, que prefiero informarme de la investigación contra el cáncer, y no de que Belen Estéban se haya operado las pestañas (que es lo que le queda)

Desenchúfenla y hagan un favor al mundo.

Gran reflexión, gran serie.

La mayor parte del tiempo, es demasiado difícil. O demasiado caro, o demasiado peligroso. Es solo que, una vez que te has detenido, te das cuenta lo difícil que es volver a empezar. Así que te fuerzas a no quererlo.
Pero siempre está ahí, y hasta que no lo termines siempre estará…

Ted Mosby.

Protagonistas de la serie, "Cómo conocí a vuestra madre"

Lugar apropiado, en el momento adecuado.

Y esque a veces ocurre que la magia existe, que es como si todos los planetas se alineasen, y la suerte estuviese de tu parte.

En cuentras a la persona indicada, en ese sitio, y en ese istante.
Esa persona que te hará feliz para el resto de tu vida.
Si tienes la más mínima posibilidad, una entre un millón, de que ocurre, merece la pena intentarlo.

Y así fué...

Cómo el perro pastor, se convirtió en lobo, y las ovejas le huyeron.

Si vas.

Si vas a llorar que sea de la mera alegría.
Si vas a morir que sea del gusto,
no de la envidia,
aunque si vas a matar que sea del susto,
no a sangre fría.
Si vas a echar, que sea de menos en falta.
Si tienes que luchar que sea por ello,
y si vas a perder, que sea la verguenza o tu miedo.
Si vas a dejarme que sea sin habla,
que se me caiga la baba y no pueda articular palabra.
Si vas a pecar que sea de inocente,
de callar con un beso, de evitar lo evidente…

Llámame loco, pero en serio,
creo que no existen las malas acciones,
sino una mala forma de ejecutarlas.
Así que por qué empeñarse
en las modas y en ser como el resto,
si el valor, el verdadero valor,
es ser individual, es lo que pienso yo almenos….
y que menos que si vas a ser algo en la vida,
que seas especial.

Gran canción, os la recomiendo  ♥

La juventud.

Hoy día, cada vez, los niños tienen "pareja", móvil, o incluso opinión ante los padres más pronto.
Todos los días me cruzo con niñas de 12, o 13 años con una blackberry o un iphone.
Me parece algo absurdo, y un capricho más de los padres, que cada vez los consienten más.
Con esto solo conseguirán chafar el futuro de sus hijos, porque los aconstumbrarán a tenerlo todo cada vez más "mascadito". Así nos deparará el futuro...
Otra cosa, es el amor, que cada día está menos sobrevalorado por culpa de niñatos que sueltan un "te amo" a la más mínima, sin tener ni un poquito de idea de qué es el amor...
Me pregunto, qué dejarán para un futuro...

Patético.

Cómo dije en mi primera entrada, iría poniendo en el blog todo lo que se me ocurriese, o cosas de mi día a día, de lo cual crea que deba exponer...
Tema Mourinho...
Me parece increíble, y una falta total de profesionalidad por su parte, el meterle un dedo en el ojo a Vilanova. ¿Qué pretendía? ¿provocarle?
Cómo un gran profesional, debería haber intentado calmar a los demás, no provocar lo contrario...

Fuego y hielo.

Unos dicen que el mundo sucumbirá en el fuego, otros dicen que en hielo.
Por lo que yo he probado del deseo, estoy con los que apuestan por el fuego. Pero si por dos veces el mundo pereciera, creo que conozco lo bastante el odio para decir que, en cuanto a destrucción, el hielo también es grande y suficiente.

Robert Frost.

No quiero un príncipe azul.

No quiero alguien igual a mí, quiero alguien que no esté de acuerdo conmigo en todo, discutamos, y me calle con un beso.
Que me escuche incluso cuando diga una estupidez, suspire, y acabe soltando una sonrisa.
Quiero que esté pendiente de mí, pero tenga su espacio, y me deje el mío.
No quiero que sea perfecto, lo quiero especial, con personalidad propia.
Que sepa que estoy mal, y me pregunte qué me pasa.
Y por último, que le encanten tanto los pequeños detalles, tanto como a mí.

Es fácil.

Con quién más a gusto estés. Y seas más natural. Las palabras te salen solas y no te da miedo ser tú.
Te sientes refugiada o protegida. Tranquila, y segura. No te da miedo que lo sepa absolutamente todo.
Eres incapaz de no acordarte al menos un seg al día de él. Y tampoco aguantas sin saber nada en un solo día.
Eres incapaz de ocultarle un secreto. Te mueres al estar separados mucho tiempo.
Imposible no sacarle un tema de conversación, se te hace eterna su espera.
Os entendéis cómo nadie.
Si está mal, estás mal, si está bien, estás bien.
No soportas verlo sufrir.
Matarías a otra persona, si le hace daño.
Simplemente, es algo tan sencillo como respirar.

En fin...

Y un día te das cuenta, que la vida no tiene ningún sentido.
Nacemos para estudiar, estudiamos para trabajar, y trabajamos para jubilarnos.
Buscamos pareja para casarnos, y nos casamos para divorciarnos.
No tengo nada para ilusionarme, o valorarme.
Familia… Amigos… Vacaciones… un complemento, que aprecio, pero me canso.
Me canso de no sorprenderme por nada, de que todos los días haga algo distinto y me suene a rutina. De sonreír para esconder una lágrima, de fingir que todo el mundo me cae bien por ser simpática. De conformarme con lo que tengo, y menospreciarme. De dar todo por una amistad o lo que sea, y que no devuelvan ni la mitad…
Un sinfín de cosas, y lo único que tenga para expresarme, es escribir un texto en una red social, ni siquiera es algo material…

Sueños, hermosos e inalcanzables.

El amor perfecto, no existe. Ni siquiera en la más perfecta relación, o la más compatible pareja.

El enamoramiento, se pasa, acaba porque sí, o porque la gente se cansa de esa monotonía. Puedes tener la suerte de que te vuelvas a enamorar más de una vez de la misma persona, en ese caso duraría más.
Pero, tarde o temprano, dejaría de coincidir, o simplemente, dejarías de enamorarte. Solo queda el cariño, amor familiar, atracción física, y seguridad. Son motivos, los cuales nos hacen permanecer al lado de una persona, para siempre.
Y, ¿Cuánto es un "para siempre" en la escala humana? El término para siempre, lo usamos muy a menudo, y nunca lo cumplimos, pues como mucho sería toda una vida, y en nosotros, ¿Cuánto es? ¿85, 90, 100 años? un siempre, debería de ser mínimo los 5100 millones de años que tiene la tierra, y que no acabase nunca... pero no somos inmortales, y eso es algo que no tiene solución.

Por estas razones, hay que amar, hay que amar con defectos y virtudes; no sólo con los defectos que te encantan, si no también con los que odias, aprender a convivir con la persona que más fácil y natural te resulte, dejando de lado el físico, y pequeños errores; porque nunca vas a encontrar nada perfecto como en las películas románticas.

Imposible.

Es una de las cosas que, por mucho que quieras olvidar, o ignorar, no lo consigues.
Son sentimientos que no se controlan, y que se confunden a menudo. No te dejan concentrarte en el resto del mundo, y te hacen pasarlo mal.
Sientes que no encajas en ningún sitio, que no sabes lo que quieres, y que de todas formas no lo vas a conseguir.
Que cuando lo veías todo de color, se te nubla la vista, y se vuelve negro. Recuerdas que más de una vez te equivocaste, y ya no se puede arreglar.

Soy capaz de manejar las sombras, pero no de luchar contra un eclipse.

♥

Esta vez, no es cómo siempre. Los típicos nervios, la tendencia a alejarme, y la vergüenza, no están.
Es distinto. Cómo si algo o alguien con una fuerza sobrenatural, me forzara a mirarte hasta el fin del mundo, a analizar cada milímetro de tu cuerpo y memorizarlo en mi mente, a recordarte en cada instante. Y no es un recuerdo, feliz, aunque tampoco triste, es más bien como una orden, una obligación que algo dentro de mí, me exige que lo haga involuntariamente, es cómo respirar.
Me quedo hipnotizada, al notar que sonríes.
Y cuando sin querer, traspasamos nuestros límites, y nos acercamos más de la distancia que guardamos normalmente, es cómo si se parase todo, hasta mis latidos, desconecto, me quedo sin habla.

La vida.

¿No te has parado a pensar que la vida nunca tiene sentido?
Nada es nunca como se cree que es. Lo negro, suele ser blanco, lo blanco, negro.
Pero no sólo me refiero a eso, sino también a los intentos en vano que hacemos de conseguir las cosas, porque un día pensamos que luchando se consigue, y al siguiente, que solo pasará si está en nuestro destino.
A lo largo de la vida, cambiamos muchas veces nuestra forma de pensar, e inconscientemente, lo hacemos de manera que logremos evadirnos de la realidad, y meternos en nuestro propio mundo. Es un sistema de defensa del organismo, para soportar cosas con las que realmente no podríamos, es como… si nos drogaran.
Y a pesar de todo, somos siempre peores que los animales, aunque nos cueste admitirlo. Por ejemplo un gato al que un perro le haga daño, no se volverá a acercar a dicho perro, o incluso una mosca se puede chocar 500 veces con un cristal para salir por la ventana, pero a la 501 o a la 502 conseguirá salir.
Nosotros no, ya podemos tropezar muchísimas veces en una piedra, que volveremos a caer, porque buscaremos una forma de pensar que diga que ésa, es la mejor solución.
Así que mejor abstenerse a la teoría que dice que mientras haya una posibilidad, o media posibilidad entre mil millones de que pase, vale la pena intentarlo.
Ya que, como dijo alguien, los únicos errores que cometemos en la vida, son las cosas que no hacemos.
Pero, eso sí, hay que saber valorarse, y rendirse en el momento oportuno, porque...

Si algo realmente vale la pena, volverá.

Es así.

Las historias verdaderamente bonitas, y perfectas, solo ocurren en las pelis.
Sí, es cierto, por muy bonita que te parezca la tuya, nunca lograrás superar las historias de las películas. Y es que si alguna logra al menos igualarla, es porque se fija en los detalles de éstas.
¿Y por qué ocurre eso? Por miedo, porque las personas de verdad, somos unos miedicas. Pensamos, que si cansamos mucho a esa persona, sin insinuarle nada, se acabará yendo. Nunca arriesgamos, ni apostamos, a que nada sea más bonito, nunca intentamos hacer una historia diferente…

Pero… nada, ni nadie puede cambiar el mundo, y menos yo, que por mucho que diga, o piense, acabo actuando como todo el mundo.

Momentos.

Momentos como, una sonrisa alguien a quien quieres, los segundos anteriores a unas simples fotos, el olor de una persona que te importa, un abrazo, sentir la respiración de esa persona antes de un beso…
Son momentos por los que merece la pena vivir, seguir adelante a pesar de grandes baches.
Porque la vida es muy bonita, pero corta. Y la felicidad se mide por la intensidad de pequeños momentos, y no porque algo dure más o menos tiempo.

No pido más.

Más de una vez, se decide cambiar, buscar un objetivo en la vida, para estar completo o al menos casi lleno, y poder ser feliz.
Bajas a la calle, y ya no piensas como antes. Te pones en el lugar de cada persona, intentas imaginar cómo vive, y piensas si realmente, es feliz.
Entras en una espiral de pensamientos, pero todo lo predicho, te parecen extraño, y sientes miedo a lo desconocido, incapacidad de arriesgar y apostar por algo.
Es muy difícil encontrar la felicidad absoluta, mejor dicho, es imposible, porque cuando consigues ser totalmente feliz, tarde o temprano, te cansas, y esa felicidad desaparece, puesto que nada es para siempre.
Hay otras ocasiones, en las que reflexionas, y te haces preguntas a ti mismo sobre lo que ya tienes. ¿Y si mi felicidad está cerca? ¿La tuve todo el tiempo delante y no me di cuenta? Decides intentar, llevar a cabo esa acción, pero antes de actuar, vuelves a rectificar. Si fuera mi felicidad, aparecería, en un momento y me daría cuenta al encontrarla, y no la tendría todo el tiempo delante de mí como si nada…
Volviendo a “re-reflexionar”… si no buscas, no encuentras ¿Y si sin querer dejas pasar tu felicidad?
Yo, prefiero esperar, aunque ya esté demasiado cansada… A todo el mundo le llega la felicidad tarde o temprano, ¿A mí por qué no?
No pido estar a tres metros sobre el cielo, no tengo alas…
Tampoco pido tener todo el oro del mundo, no es oro todo lo que reluce…
Solo quiero saber la razón por la que he nacido, no pido mas…

Una vez más.

Me paro a escribir, para desahogarme, ya que no sirve para nada más.
De hecho creo que nadie lo leerá, pero es igual... me siento mejor.

Una noche más, me paro a pensar un porqué, una sola razón por la que siempre me pasa lo mismo. Y no paro de repetirte que estoy harta, pero en parte es culpa mía, porque yo "quiero"

Un instante más, vuelvo a caer, a rendirme, a intentarlo, para nada.

Lo tengo todo, y no siento nada.

Es lo que toca.

aguantar esos fracasos del pasado que ya no tienen arreglo...
guardar los recuerdos, nunca olvidarlos...
afrontar la realidad, y admitir que perdí...
cambiar de libro mejor, que pasar página...
emprender nuevos sueños, aunque solo tenga uno...
aceptar la derrota, pues ya perdí todas mis fuerzas...
intentar olvidar, aunque sea imposible...
sentarme, y esperar...
sonreir, aunque sea para ocultar una lágrima...

Walt Disney, Sueños.

Y así después de esperar tanto, un día como cualquier otro decidí triunfar...
Decidí no esperar a las oportunidades sino yo misma buscarlas,
ver cada problema como la oportunidad de encontrar una solución,
cada desierto como la oportunidad de encontrar un oasis,
cada noche como un misterio a resolver,
cada día como una nueva oportunidad de ser feliz.

Aquel día descubrí que mi único rival no eran más que mis propias debilidades, y que en éstas, está la única y mejor forma de superarnos.
Aquel día dejé de temer a perder y empecé a temer a no ganar,
descubrí que no era yo la mejor y que quizás nunca lo fui.
Me dejó de importar quién ganara o perdiera;
ahora me importa simplemente saberme mejor que ayer.

Aprendí que lo difícil no es llegar a la cima, sino jamás dejar de subir.
Aprendí que el mejor triunfo que puedo tener, es tener el derecho de llamar a alguien "Amigo".

Descubrí que el amor es más que un simple estado de enamoramiento, "el amor es una filosofía de vida".
Aquel día dejé de ser un reflejo de mis escasos triunfos pasados y empecé a ser mi propia tenue luz de este presente; aprendí que de nada sirve ser luz si no vas a iluminar el camino de los demás.

Aquel día decidí cambiar tantas cosas...

Desde aquel día ya no duermo para descansar... ahora simplemente duermo para soñar, porque los sueños, están para cumplirse.

Walt Disney.

Algo inexplicable.

Ya está otra vez esa sensación... que es cómo cuando tienes ganas de bostezar y por mucho que lo intentes no te sale. Que se te queda todo el aire en la tripa y sube a la garganta pero ni sale, ni vuelve a los pulmones.

Hasta que no consigo lo que quiero, no puedo alcanzar la otra sensacion... ésa que es igual a cuando por fin después de mucho tiempo con la de antes, consigues bostezar.
Puedo relajarme, estar segura, y tranquila, como en casa.

El tiempo.

Cuando más rápido quieres que pase, más tarda, y viceversa.
Cuando estás en el mejor momento, se para.
Cuando disfrutas, se esfuma.
Cuando lo pasas mal o esperas, parece que le cuestra trabajo seguir adelante.
Cuando está transcurriendo no lo notas, pero depués te das cuenta que pasó demasiado rapido.

Sí, hablo de él, nuestro amigo el tiempo, o a veces enemigo, según como lo queramos mirar...
Pero de una manera u otra dependemos siempre de él. Así que lo mejor será aconstumbrarse.

¿En qué consiste este blog?

En este blog, haré mis reflexiones, sobre el amor, la vida, la amistad, etc...
También, pondré alguna que otra historia de vez en cuando.
Y aportaré algunos recursos que encuentre interesantes por la web.
Espero que os guste, recomendadlo a vuestros amigos y comentad! :)

Un besazo bloggeros!